El carcinoma gástrico (CG) es en el momento actual un problema en ascenso, con un elevado porcentaje de los enfermos que se diagnostican en estadios clínicos avanzados. Ocupa el cuarto lugar en incidencia y el segundo lugar en mortalidad entre todos los cánceres en el mundo1. En el 2006, de acuerdo a lo publicado como causa de defunción en México, los tumores malignos fueron la tercera causa de muerte (63,888 defunciones) y ocupó el tercer lugar de frecuencia en los varones precedido por los de próstata, tráquea y pulmón; en las mujeres ocupó el cuarto lugar (precedido por los de mama, cervicouterino, de hígado y de vías biliares)2. Más recientemente, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, del 2000 al 2013 se registraron más de 72,000 a causa de CG o sus complicaciones; seguido por las defunciones hospitalarias por padecimientos oncológicos como el carcinoma de próstata (69,058 casos), el de mama (63,826 casos) o el del cuello uterino (57,854 casos).
La etiopatogenia del adenocarcinoma gástrico (AG) es compleja y multifactorial, ya que nvolucra en su desarrollo alteraciones genéticas y epigenéticas (Helicobacter pylori, ingesta elevada de sal, humo de tabaco y, en algunos casos, un componente genético familiar). Más del 95% de los casos son adenocarcinomas de histología intestinal y difuso. El tratamiento quirúrgico en etapas tempranas es lo indicado. Por lo que la identificación y la vigilancia de pacientes con riesgo puede ser significativo en la prevención y supervivencia. El tratamiento anti-H. pylori ha mostrado ser una medida eficaz. El tratamiento con quimioterapia es lo indicado en estadios clínicos (EC) avanzados, incluyendo el uso de anticuerpos monoclonales que actúen inhibiendo el factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF) como el ramucirumab, cuya utilidad en CG en EC avanzados y/o recurrente ha sido demostrada. El ramucirumab ha sido recientemente aprobado en el tratamiento del CG3 de acuerdo a las directrices del National Cancer Center Network (versión 3, 2015) y que se integra a las terapias dirigidas en el tratamiento del CG avanzado.
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